
¿Como van a silenciar al jilguero ni al canario, si no hay cárcel ni tumba para el canto libertario?
(Magö de Oz)

Antoine de Saint-Exupéry revolviéndose en su tumba.

Las pizarras se pueden borrar. Las bocas se pueden acallar. Los corazones se pueden rendir. La redundancia cíclica estará siempre ahí.
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